jueves, 8 de noviembre de 2012

Textos disparatados.

          El ejercicio consistía en abrir el diccionario por una página cualquiera y construir un texto con 10 palabras (entradas) como mínimo.


         Había una vez un niño llamado Espantoso que adoraba al equipo español. Su especialidad era hacer esparto. Su hermana era espantosa, refea y española. Tenía la cara como una espátula, era una especie de espárrago. Todos los especialistas, se metían con ellos y les tapaban la boca con esparadrapos. Un día los niños empezaron a esparcir algo muy especial y dejaron de meterse con ellos.



                                                      Realizado por Andrea Ramos de 5º C



          Érase una vez un pensador penoso que sin pensarlo tomó penicilina, aunque no le dolía nada. Fue a buscar a su amigo Península y a su hermano Peninsular. Jugaron en la penitenciaría a pensar pensamientos.

          El pensativo jefe de la penitenciaría se cayó y tuvo una pensión de pensionista. Más tarde fueron a jugar con Pensar, su otro amigo.

                                                       Realizado por Alfonso Tejedor de 5º C


El pensador de Rodin.
                        
          Érase una vez un pensador que se fue a la Península Ibérica a vivir. El hombre pensativo que se fue a la zona peninsular, le apeteció pensar un pensamiento tan loco, que mejor ni pensarlo. Alquiló una casa, por lo tanto era un pensionista que tenía una pensión muy alta. El hombre pensador, que también era penoso; pensó que si penitenciara, sería mejor. Y antes del día de la penitencia, se tomó una penicilina.
                                                      

                                                        Realizado por Pablo Fernández de 5º C





Tutora de 5º C: Maribel Garrido.

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